Todas las opiniones cuentan!

Últimamente en los comentarios me he encontrado con una que otra opinión acerca de que nunca los leemos y que tampoco se les hace caso. Yo por mi parte he de decirles que siempre leo todos los comentarios hechos a mis artículos, incluso cuando han sido más de cien (y que en el caso de mis compañeros reporteros más de una vez he leído que algunas de sus noticias y/o imágenes son producto de la sugerencia de los seguidores) Y en específico sobre esta serie de artículos acerca de otras historias donde humanos y vampiros se enamoran les diré que por su recomendación ayer comencé a ver Vampire Knigh y pronto hare lo mismo con Vampire Diares para que en un tiempo podamos comentarlas.

Pero ya que hemos mencionado una serie de Anime y con esa fibra “otaku” que tengo dentro de mi…

Yo también amo a un Vampiro

…hoy les intentaré platicar sobre otra serie Japonesa llamada Trinity Blood, y digo “intentaré” porque es realmente revuelta y complicada. Se desarrolla en un futuro muuuuy lejano, más allá del año 5000. Y es una realidad en la que la Iglesia Católica Romana prácticamente manda sobre todo el mundo (otra vez) y la persona más importante dentro del Vaticano es La “Cardenala” Caterina Sforza. También en este mundo hay dos tipos de vampiros, los primeros y más comunes llamados Mathuselem y tienen sus propias sociedades aparte de los humanos (aunque como en todo, hay algunos que no son muy gustosos de seguir reglas). Los segundos son las maquinas Krusnic, vampiros que se alimentan de la sangre de otros vampiros y tiene su origen en un mito Slavo con fundamento Bíblico.

Aquí los enamorados son Abel Nightroad y Esther Blanchett. Ella es una monja, si, una monja y él un sacerdote, si, un sacerdote y también un vampiro Krusnic. En medio de una guerra, en la que muchas veces es difícil mantener el hilo de la historia, ellos dos se enamoran. Pero ninguno de los dos se atreve a dejar sus otras misiones por estar juntos. En el inter, ella tiene otro romance, con otro vampiro llamado Ion (duque Mathuselem de Menphis). Pero bueno, con ambos mantiene relaciones muy intensas y resulta difícil decir cuál de los dos es su verdadero amor, además, el final no ayuda mucho a definirlo.

Con todo, Trinity Blood, es uno de esos animes dignos de verse una y otra vez, veinticuatro capítulos a los que siempre se les encuentra algo nuevo. Una animación preciosistenda llena de chicos y chicas guapas (no importa que la mayoría sean monjas y sacerdotes).

- Algo que merece mucho la pena no perderse es el ending theme Broken Wings

- El chico llamado “el bailarin de espadas” es realmente guapo.

¿la conoces? Si es así, ¿que te parece?

Un saludo,